Entre las funciones del escayolista en construcción encontramos la instalación y aplicación de este material en techos, paredes, molduras… Su trabajo es fundamental para mejorar la estructura y funcionalidad de los espacios.
Como cualquier tarea dentro del sector de la construcción, su desempeño incluye ciertos riesgos. Conocerlos es fundamental para evitarlos, por eso con nosotros puedes formarte en cualquier curso de prevención de riesgos laborales en construcción, de la especialidad que prefieras.
Estas son las funciones de un escayolista en construcción
El trabajo de este profesional es fundamental para los acabados interiores, la incorporación de detalles decorativos y la funcionalidad de los espacios.
Sus funciones principales son:
- Preparar las superficies en las que se va a aplicar la escayola.
- Mezclar el material, que se aplicará en forma líquida o más pastosa.
- Aplicar la escayola con herramientas especializadas que permitan lograr el acabado deseado.
- Instalar placas y molduras, que habitualmente se fijan con adhesivos especiales.
- Lijar y pulir las superficies para obtener un acabado perfecto.
Riesgos laborales a los que se enfrenta el escayolista
Las funciones del escayolista en construcción llevan consigo ciertos riesgos que son habituales en el día a día. Evitarlos es una cuestión de formación: conocerlos, evaluarlos e implementar las prácticas necesarias para que no ocurra nada grave.
Algunos de estos riesgos y las medidas para evitarlos son:
- Exposición a polvo: la manipulación de la escayola y los procesos de acabado generan grandes cantidades de polvo, muy perjudicial para los pulmones. Utilizar mascarillas, protección respiratoria y trabajar con sistema de ventilación y extracción de polvo es fundamental.
- Caídas: el trabajo en andamios y escaleras es muy habitual en la profesión de escayolista al colocar el material en techos y zonas altas. Es imprescindible por lo tanto el uso de equipos de protección individual como arneses, además de asegurar correctamente andamios y escaleras.
- Lesiones: los movimientos repetitivos, la carga de materiales pesados y las posturas incómodas a las que están sometidos los escayolistas pueden provocar lesiones. Prevenirlas comienza por una adecuada formación en ergonomía, hacer pausas frecuentes y utilizar las herramientas adecuadas.
- Quemaduras químicas: la escayola no es corrosiva, pero su mezcla con agua genera calor, lo que puede causar quemaduras si está en contacto prolongado con la piel. Es necesario entonces utilizar guantes y ropa especial.
Evita los riesgos: fórmate con nosotros en prevención
Otro de los riesgos más habituales es el de contactos eléctricos, ya que en algunas obras puede haber cables expuestos o herramientas que no están aisladas como deben.
La caída de objetos también puede ocurrir, por ello es tan importante utilizar casco y organizar adecuadamente los espacios de trabajo.
Las funciones del escayolista en construcción han evolucionado con la introducción de nuevas herramientas y tecnología, lo que mejora su eficiencia y transforma el oficio significativamente. A pesar de los avances, el escayolista sigue enfrentándose a los riesgos propios de la construcción, por lo que la prevención es fundamental.
